SKATEPARK SISTERHOOD

—Dani, el día que llegamos a Addis Abeba, el gobierno declaró a todos los periodistas occidentales enemigos del estado.

—¿Por qué no os volvisteis? 

—Llevábamos semanas atrapados en Nueva York esperando el visado para entrar. Teníamos algo de protección a través de un contacto local.

—¿Policía o militares?

—No, en absoluto. Seguridad privada.

—Sois muy valientes. En un país como Etiopía, se os ve a la legua.

—Sí, pero ya estábamos allí, no íbamos a irnos, ¿no?

—Se os ve muy cansados.

—Estamos exhaustos. Han sido unas semanas muy duras.

—Empezaré a transferir las tarjetas y en un par de días, una vez tenga el material organizado, podremos empezar. Aprovechad estos días para descansar.

—No, prefiero ver el material. Ha sido un caos. No pudimos grabar muchas cosas que había planeado. Quiero ver exactamente lo que tenemos.

—Como quieras, pero necesitas descansar.

AL DÍA SIGUIENTE.

—He notado que los códigos de tiempo que tenéis no coinciden con la duración de los archivos. ¿Habéis editado algo en Etiopía?

—No me vaciles. Esa era la narración para el documental. Teníamos toda la historia contada por las chicas.

—Además del contenido que falta, hay una parte que es inutilizable. Tiene un filtro como los que usaba Lee Scratch Perry en sus producciones Dub.

—¡Maldita sea!

—¿No se puede volver a grabar?

—Lo hicimos dos veces, Dani. La primera vez tuvimos que cancelar la grabación, y la segunda es la que has oido. 

—Ya veo. 

—Una tercera vez desde Barcelona me parece imposible coordinar. Las chicas, el equipo técnico, la maldita guerra…

—Vamos a ver todo el material a ver qué tenemos. 

UNA SEMANA DESPUÉS.

—Estoy contenta, al menos rodamos imágenes que estéticamente funcionan muy bien.

—Sí, yo diría que icónicas.  

—Pero no podemos montar un videoclip. Necesitamos contar una historia Dani.

—Tenemos varias situaciones en Addis Abeba, un viaje en furgoneta por el país, una situación inesperada con nuestras protagonistas. Y un regreso para seguir luchando por su sueño. Veo una estructura.

—¿Y cómo vamos a contar todo eso?

—Como en las películas rusas. El enemigo está ahí, pero nunca lo ves.